El insomnio es un compañero poco agradable que nos visita más de lo que desearíamos. Noches dando vueltas en la cama, mirando el móvil, leyendo un libro, y sin conseguir dormir durante horas. Paradójicamente, a veces, cuanto más nos esforzamos por dormir, más despiertos nos sentimos. A todos nos suena esto, ¿verdad?
Según los últimos datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), más de cuatro millones de adultos en España sufren insomnio crónico, y un 35% de la población del país lo sufre de forma transitoria. En la mayoría de los casos el insomnio es producido por alguna causa primaria, como pueden ser unos hábitos inadecuados del sueño o alguna alteración psicológica como la depresión o la ansiedad.
Para solventar este problema, muchos recurren a las conocidas pastillas para dormir o benzodiacepinas. Sin embargo, este enfoque presenta riesgos, ya que el uso crónico de estos fármacos se asocia con la posibilidad de adicción y se ha vinculado a un aumento significativo en el desarrollo de Alzheimer. Además, su impacto depresor en el sistema nervioso central puede entorpecer cognitivamente.
Fitoterapia
En este escenario, surge la fitoterapia como una alternativa natural para calmar la mente y favorecer el sueño de forma armoniosa. Al conocer y utilizar adecuadamente ciertas plantas, podemos preparar infusiones o tinturas que nos ayuden a relajarnos. Por ejemplo, tomar una infusión de lavanda y azahar media hora antes de acostarnos nos ayudará a relajarnos y a conciliar plácidamente el sueño, además de evitar que tengamos pesadillas durante la noche. Otro método es ponernos unas gotas de alcohol de lavanda en las sienes y las muñecas antes de acostarnos. Y si además de no poder dormir también tenemos mucho frío en las extremidades, nada como tomar una infusión de regaliz para calentarnos las manos y los pies.
Si deseas explorar más sobre lo que las plantas pueden hacer por ti, considera informarte sobre la formación de fitoterapia que ofrece el Instituto Valenciano de Terapias Naturales. Aprenderás trucos adicionales para abordar el insomnio y otras dolencias.
Auriculoterapia
Además de la fitoterapia, la auriculoterapia se presenta como otra alternativa eficaz para combatir el insomnio. Esta técnica, arraigada en la medicina tradicional china, se enfoca en estimular puntos específicos en el pabellón auricular para aliviar diversas molestias, entre las cuales figura el insomnio. Personalmente tengo la oportunidad y el privilegio cada día de tratar exclusivamente este trastorno utilizando la auriculoterapia, comprobando así de forma continuada los resultados en distintas personas.
En el artículo “Auriculoterapia para el insomnio: un enfoque holístico para dormir mejor” puedes encontrar más información sobre cómo abordar este trastorno a través de los diferentes puntos reflejo del pabellón auricular.
Un buen ejemplo es el de Marta. Ella es una mujer de treinta años la cual era incapaz de dormir más allá de las cinco de la madrugada, hora en la que se desvelaba, a pesar de haberse acostado a las dos de esa misma noche. Había seguido un tratamiento médico durante un tiempo pero lo abandonó al no quedar complacida con el estado sedante que le producía en su día a día. En la primera sesión trabajamos con sus hábitos alimenticios, de sueño y sus creencias, y seguidamente usamos la auriculoterapia. El cambio fue inmediato y su respuesta excelente. A partir de ese día y aplicando los cambios oportunos consiguió dormir hasta que era despertada por su alarma, pudiendo incluso alargar el sueño hasta media mañana los días festivos.
Ella es un ejemplo claro de la eficacia de esta técnica. Bien es cierto que cada persona puede requerir más o menos sesiones y responder con mayor o menor rapidez, no obstante, utilizar auriculoterapia nos asegura la solidez de un método cuyos principios se cimientan en la milenaria medicina tradicional china y los estudios del Dr. Nogier, padre occidental de esta disciplina, garantizando así un procedimiento efectivo, seguro y prácticamente sin efectos secundarios.
Cada persona puede responder de manera única, pero tanto la fitoterapia como la auriculoterapia ofrecen opciones sólidas respaldadas por la medicina tradicional y estudios actuales. Al elegir estas alternativas, no solo abordamos los síntomas sino que también tratamos las causas subyacentes, brindando un enfoque más respetuoso y armonioso para conseguir un sueño reparador.
Otras prácticas
Tener una buena higiene del sueño y respetar los ritmos circadianos (ciclo sueño-vigilia) es esencial para ayudar a nuestro organismo y nuestra mente a relajarse para poder dormir. Tener una habitación ventilada con una temperatura fresca, cenar un par de horas antes de acostarse, encender solo luces ténues cuando cae el sol y evitar las pantallas antes de irse a dormir son prácticas esenciales que mejorarán en gran medida la calidad de nuestro sueño.
La meditación es una técnica milenaria que ha demostrado tener beneficios para la salud, incluyendo la mejora de la calidad del sueño. La meditación puede ayudar a calmar la mente y a reducir la ansiedad, lo que ayuda a conciliar el sueño más fácilmente. Además, la meditación nos ayuda a regular el ritmo circadiano, mencionado anteriormente.
El ejercicio regular es otra alternativa natural que nos ayuda a combatir el insomnio. El ejercicio reduce la ansiedad y mejora el estado de ánimo, lo que a su vez facilita el sueño. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el ejercicio intenso cerca de la hora de dormir puede dificultar el sueño, por lo que se recomienda hacer ejercicio al menos unas pocas horas antes de dormir.
Finalmente, mantener una dieta saludable nos ayuda a prevenir y combatir el insomnio. Hay que evitar ciertos alimentos como los carbohidratos simples y las comidas pesadas, ya que dificultan el sueño. En cambio, una dieta rica en frutas, verduras, proteínas magras y alimentos integrales puede ayudar a promover un sueño de buena calidad. Además, ciertos alimentos, como los plátanos o las almendras, contienen nutrientes como el magnesio o el triptófano que promueven el sueño.
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